viernes, 19 de agosto de 2011
Tenemos un problema...y gordo
Me he enterado hoy mismo y estoy desolada. No sé cómo solucionarlo cuando estáis a punto de venir. Estoy escribiendo mensajes a diferentes colegas para ver si alguno se decide en dos días a sustituirla.....
La única posibilidad que se nos ocurre es que se suspenda el proyecto en Ocurí y que todos os quedéis en Sucre bajo mi supervisión.
Así están las cosas. Os ruego comprensión; tendréis vuestras prácticas en otras condiciones a las previstas.
Lo siento
Un beso
Juliana
Juliana esperando al nuevo grupo
Ya estoy acomodada en el hostal Pachamama y trabajando codo con codo con Raquel en el hospital.
La llegada fue un poco accidentada, puesto que Aerosur está teniendo problemas con los aviones y hay continuamente adelantos o retrasos de última hora, además me extraviaron las maletas que venían cargadas de material didáctico. Pero bueno, por fortuna, después de dos días aparecieron; A pesar de haber facturado hasta Sucre, se quedaron en Santa Cruz.
En el Hospital, los pacientes están preguntando continuamente por la llegada del segundo grupo.
He estado revisando los historiales clínicos de ¡los 100 pacientes! que han visto entre Miosotys, Manuel, Mari Cruz, Celia y Raquel, Y LO CIERTO ES QUE LA MAYORÍA HAN MEJORADO DE SUS DOLENCIAS. ¡Habéis sido unos valientes!. Preguntan por vosotros con agradecimiento. Magnífico trabajo, de verdad. A pesar de las prisas por atender a tanta genta que esperaba, a pesar de las inseguridades, a pesar de falta de recursos, a pesar de todos los pesares, habéis sabido aliviar a esta gente tan necesitada.
¡Y qué decir de los de Ocurí!....Lo que me han contado Isa, Ángel y Almudena me hace pensar que todo es posible si, como ellos han hecho, hay una disposición positiva y ganas de sacar partido a cualquier situación. Han trabajado a destajo, han atendido a más de 200 pacientes y su trabajo ha sido muy reconocido por el director del Hospital, y además han sabido aprovechar su tiempo para divertirse, viajar y disfrutar de la amistad entre ellos. Cuando me encontré con ellos en Santa Cruz tenían un brillo en la mirada de estar felices.
Todo esto no quiere decir que no hayáis tenido dificultades, tanto los de Sucre como los de Ocurí, pero habéis sabido enfrentarlas y superarlas.
Aquí estamos ahora, Almudena (profe de Ocurí), Raquel y yo. Raquel ha continuado con algunos casos que tenían Mari Cruz y Celia: un chico (Eliot) que no hablaba, ya dice palabras, una señora con dolores por todo el cuerpo está muy aliviada (Dorita), un señor que sufre de mareos y de viento interno (Santiago) ahora siente su ánimo dispuesto a recuperarse del todo y aunque sigue con palpitaciones, ya no reniega tanto y su familia está más feliz....
Las clases las empecé ayer. Pude constatar el buen trabajo realizado previamente por Íñigo (el profe que estuvo anteriormente). En un mes han asimilado estupendamente la teoría y hemos empezado ya la práctica. Esta gente tiene inteligencia y soltura, aunque son tan tímidos y contenidos que a veces no lo parece. Sin embargo, aprenden rápido. Si las cosas siguen así, una vez que nos vayamos de acá, podrán continuar los tratamientos que dejemos a medias. Gracias Íñigo.
No hace nada de frío en Sucre. Sol durante el día y tiempo otoñal por la noche. La ciudad con su caos y algarabía habitual, pero es hermosa. Olores, colores, muchas personas siempre por la calle, vida, vida y más vida, cargada de sus miserias y tesoros. ¡Os gustará!.
Bueno, que me tengo que ir al hospital. Son las 8 de la mañana. Estaremos tratando pacientes durante la mañana y organizando vuestra llegada, y por la tarde nuevamente cuatro horitas de clase.
Besos a todos
Juliana