sábado, 16 de julio de 2011
Almudena, la profe de Ocurí, con muchos ánimos
Primeras impresiones de Ángel
Hola a todos!
Estoy en Sucre, la capital constitucional de Bolivia. Hace dos días que ha llegado la primera expedición de 7 alumnos y 2 profesores para, por un lado, difundir la Medicina Tradicional China entre los profesionales sanitarios de este país y, por otro, para atender a la población de esta ciudad y de la aldea de Ocuri en la provincia de Chayanta - Potosí. Continuación de la labor que inició nuestra profesora Juliana Guzmán el verano pasado. En el mes de agosto ella misma se incorporará con el segundo turno.
Todo el viaje ha ido muy bien.
Esto os encantaría: grandes mercados, mucho colorido en todos los sentidos, ...
Mañana salimos a las 8: 30 para la aldea a 4.100 metros de altitud. A ver que tal nos adaptamos..
Nos han acogido muy bien!: las organizaciones locales, los médicos, los medios de comunicación,la gente.
Comemos bien. Dormir es otra historia: Ángel y Almudena se desvelan, a Felix sé le reseca la nariz pero no pierde comba y no veas como duerme el lirón, Isa, muy prudente, es la única que pasa desapercibida.
En Sucre no hace tanto frío, sólo de noche y a primera hora de la mañana. Ocuri será otra historia.
Hay mucha gente en la calle a todas horas, comprando y vendiendo. Hay grandes diferencias entre la población más rural y la gente de ciudad. Los primeros están en una situación más marginal, pero salvo pocos extremos, todo el mundo tiene vida, ganas de conversar, los niños juegan en cualquier lugar con muy poca edad. Los mayores llevan en sus rostros muchas cosas escritas en cada gesto o rostros castigados por la dureza, pero en todos ellos no he visto el estrés, la desgana o la soledad, el chico acompaña al grande, la hija a la madre,...
Hay muchos puestos en la calle, verduras increíblemente presentadas, lugares para comer: zumos, tortitas, y mil cosas más.
En este ambiente multicolor, la gente inmigrante de las zonas rurales son minoría, un modo de vida que se resquebraja poco a poco de lo urbano. Cuando subamos a la aldea, lo indígena será mayoría y allí las cosas serán distintas imagino.
Todos estamos ilusionados con el inicio de nuestra labor aqui. En el hospital de Sucre ya han preparado todo para iniciar las consultas y los tratamientos. Mis compañeros, todos, nos estamos adaptando. Estamos muy unidos. Anoche nos hicimos la cena aqui en el hotelito: tortilla de verdura, ensalada, queso, pollo,... todo exquisito y el ambiente sano.
Por las noches, antes de dormir, Felix, Isa y yo, los compañeros que vamos a Ocuri y los que sé quedan en Sucre nos pegamos una pecha de reir por cualquier tontería y que conste! no es por culpa de las hojas de coca.
Aqui andamos. Quería compartir con vosotros estas pinceladas del viaje en este ratito de insomnio mañanero, aqui son las 7: 11.
Os enviamos un abrazo grande.
Felix, Isa, Almudena.y Ángel